Las patatas se consideran un cultivo sin pretensiones: se pueden plantar y cosechar en cualquier lugar. Pero con tal actitud es imposible obtener altos rendimientos. Depende de la calidad del trabajo preparatorio. Algunos de ellos son la preparación otoñal del suelo para plantar patatas en primavera. Los siguientes consejos le ayudarán a aumentar significativamente su cosecha futura.

Seleccionar un sitio para plantar
Las patatas se pueden cultivar con éxito en muchos suelos adecuados para la planta. Más importantes son la iluminación del área designada y suficiente humedad. Superar la norma de este último tiene un efecto extremadamente negativo en el desarrollo de la planta. También aumenta la probabilidad de enfermedades fúngicas y bacterianas, incluido el tizón tardío. Las patatas son un cultivo amante de la luz. La luz insuficiente provoca el estiramiento de las puntas, un rápido amarillamiento de las hojas y una floración débil. El resultado son tubérculos pequeños y una cosecha muy modesta.
Determinando el tipo de suelo
A las patatas les va bien en suelos ácidos, pero lo mejor es un suelo ligeramente ácido. Por tanto, el encalado se realiza en suelos medios y fuertemente ácidos. Se debe prestar especial atención a la densidad del suelo. El acceso insuficiente al oxígeno empeora las condiciones para el desarrollo de las raíces, que se deforman con el tiempo.
Aflojamiento
El arado del suelo en otoño se lleva a cabo con el objetivo de crear una capa de suelo profunda, suelta y bien ventilada en la que se acumulará y permanecerá la cantidad necesaria de humedad.Cabe señalar: ningún otro trabajo agrícola (riego, abono...) puede proporcionar suficiente oxígeno.
Destrucción de malezas y plagas.
Como resultado de un aflojamiento adicional, la cantidad de semillas de malezas se reduce notablemente y se eliminan los patógenos de las enfermedades de la papa. Al arar manualmente, sería bueno eliminar los sistemas de raíces de las malezas (pasto de trigo) y las larvas (escarabajo abejorro, gusano de alambre).
Seleccionar la rotación de cultivos adecuada
Es mejor plantar patatas en suelo virgen. Pero en la práctica hay que cambiar el cultivo del huerto o plantarlo en el mismo lugar. Debido a la presencia de plagas comunes en las solanáceas (tomates, berenjenas, pimientos), no se recomienda plantar patatas después de ellas. Las zonas donde solía crecer el repollo tampoco son adecuadas. La razón es que se utiliza mucha cal para combatir sus enfermedades, lo que aumenta la probabilidad de que aparezcan costras en la patata. Se permite alternar la siembra de patatas con remolacha, calabacín, cebolla, pepinos, frijoles y guisantes. Podrás regresar a tu antiguo lugar después de 3 o 4 años.
Restaurar la fertilidad del suelo mediante abono verde
Después de la cosecha, se planta en el sitio mostaza o berros de rápido crecimiento. A mediados de octubre es necesario cortar la vegetación y excavar la zona (a unos 20 cm de profundidad). Además, dicho arado destruirá las plagas que acabarán en la cima y morirán con las primeras heladas.
Fertilizando el suelo
Es especialmente importante aplicar nutrientes en zonas sin rotación de cultivos. En tales casos, el suelo se agota durante varios años y no puede renovarse.La ceniza es muy adecuada para fertilizar el suelo, ya que contiene una gran cantidad de fósforo, calcio, potasio y otros microelementos necesarios para las patatas. Se consumen de 8 a 19 kg de ceniza por 100 m2. Otros fertilizantes (compost, estiércol y superfosfato) se aplican mejor en la primavera.
Instalar trampas para plagas
Con ayuda de dispositivos sencillos se pueden recolectar muchos grillos topo y escarabajos de la patata de Colorado, que se convertirían en una amenaza para la futura cosecha.
La preparación del suelo otoñal en el sitio es muy importante. Vale la pena escuchar sencillos consejos para que la próxima cosecha sea rica y de gran calidad.